PISO EN LEGUTIANO

En este proyecto nos encontramos una vieja casa con muy poca luz, con suelos y puertas oscuras, un pequeño recibidor y un largo pasillo. El reto era conseguir una casa cómoda, sencilla, funcional y luminosa.

Para dar mayor sensación de amplitud agrandamos el recibidor. Tiramos el tabique que separaba la sala para acortar visualmente el pasillo. Los listones de madera natural con la puerta de cristal permiten el paso de la luz y nos permite disponer de un armario empotrado en el pasillo integrado totalmente con el resto de las puertas de la casa. Las puertas, lacadas en blanco, ayudan a conseguir más luminosidad y amplitud. El papel pintado del pasillo da calidez a esta zona de paso y a su vez, forma parte de la sala de estar.

En el dormitorio el armario a medida, el cabecero y la mesilla están lacados en blanco de manera que el papel colocado tras el cabecero es el verdadero protagonista.

En la cocina hemos colocado la misma cerámica que en el suelo hasta media altura en la pared de la zona de mesa, y una de las paredes la hemos pintado en pizarra.

En el baño el plato de ducha está colocado a ras del suelo. La cerámica rugosa de la pared color piedra, junto con el suelo hexagonal de diferentes tonos tierra y el mueble de lavabo de madera, aportan aún más calidez.

Además os enseñamos dos habitaciones preparadas para la siguiente fase de este proyecto, espacios con los que seguir soñando en el hogar perfecto.